lunes, 28 de abril de 2008

Cicatrices de colores

Volemos nuestras cabezas con el primer color que encontremos y que no importe esta vez si la kinestecia nos tritura los ojos. Al fin y al cabo son sólo dos globos vacíos que nos mienten al mirarnos y confunden los destellos con la historia que nunca se contó.
Volemos nuestras lenguas. Desatémoslas del mundo, de su idioma y de hasta del texto que pretende expurgar penas y sanar culpas... Una vez que apacible yace en la hoja,es pura apariencia sin energía.

Y esto mismo pretende ser intento de controlar cicatrices pero no es más que el puñado de aquellas palabras que promulgo destruir.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

¿y el péndulo? De repente comprendió que usted es el movimiento. Saludo su filosofía....aunque suene mal felicitar una desgracia, la desgracia de quien comprende las cosastan temprano.
Cariños. A.G.

* 2 << Deux >> 2 * dijo...

Mi visión es pendular. Al menos,siempre trató de serlo.. Vaivenes eternos con ritmo propio que pocas veces se asimilan a la monotonía exterior.

Gracias lejanas iniciales por tu nueva visita.

El Tano dijo...

La energía es indestructible, se encadena a ella misma y genera nuevamente energía. Mis ojos, mi lengua y mis manos, ya no quieren expresar de manera alguna, todo el dolor que veo.